Enoturismo y naturaleza en Albacete

Itinerario

Día 1. Origen – Albacete – Hellín

Salida del lugar de origen con destino Albacete. Llegada al hotel, acomodación y almuerzo. Por la tarde visita a Hellín. La ciudad cuenta con un casco histórico que conserva muestras arquitectónicas desde la Edad Media, en el siglo XII, hasta la actualidad. Contemplaremos sus casas señoriales y nos adentraremos por su laberinto de calles para descubrir sus antiguos barrios judío y musulmán así como bellos edificios, entre los que destacan la Iglesia de la Asunción, la Ermita de Nuestra Señora del Rosario y el Convento de Franciscanos. Visitaremos el Museo Comarcal de Hellín (entrada incluida), situado en un edificio modernista de finales del siglo XIX y con una importante colección de arqueología y etnografía. Regreso al hotel, cena y alojamiento.

 Día 2. Fuentealbilla – D.O. Manchuela – Alcalá de Júcar – Jorquera

Desayuno. Salida hacia Fuentealbilla, localidad famosa por ser la natal de Andrés Iniesta. Visitaremos su bodega, de la D.O. Manchuela (entrada con visita guiada incluida) donde conoceremos el proceso de cultivo y elaboración de sus vinos. Finalizaremos con una cata de vinos y degustación de queso manchego. Almuerzo típico en la bodega.  Traslado hasta Alcalá del Júcar, una de las localidades más bonitas de España. Está construida sobre un meandro del río Júcar encima de la roca o excavando en el interior de la roca, y donde podremos visitar en los famosos túneles de la cueva de Masagó o la cueva del Diablo. La localidad está declarada Conjunto Histórico-Artístico, y en su legado se incluyen obras como su Castillo del siglo XII y de origen árabe, la Iglesia de San Andrés, la ermita de San Lorenzo, el Puente de la Rambla o su Plaza de Toros, esta última destacable por tener una forma irregular. Asimismo, son de destacar sus viviendas excavadas en las rocas. Tras la visita, nos dirigimos a Jorquera, sobre un meandro del Júcar. La roca asciende con las casas perfectamente ensambladas y a sus pies el corte de la piedra del cañón del Júcar. En su casco urbano el edificio más notable es la parroquia de la Asunción del siglo XVI, de construcción gótica concluida con elementos renacentistas. Cerca del ayuntamiento encontramos la casa del Corregidor, edificio barroco del siglo XVIII con labras heráldicas en la fachada y el escudo del Marqués de Villena. El paseo sosegado nos detiene sobre otros escudos labrados en las fachadas como el escudo de los Tomás-Alarcón o el escudo de los Ortega. Regreso al hotel, cena y alojamiento.

Día 3. La Suiza Manchega: Ayna – Nacimiento Río Mundo – Riópar – Liétor

Desayuno y salida hacia Ayna, donde podremos contemplar la Plaza Mayor, de singular estructura; la ermita de los Remedios, edificio con apariencia externa de una casa más, pero que en su interior guarda su más preciada joya, un artesanado del siglo XVI elaborado con madera de pino al más puro estilo mudéjar; la Iglesia de Santa María de lo Alto, construida sobre la antigua ermita de la Virgen, en la que destaca su torre del siglo XVII y la imagen de la patrona y niño resucitado en talla de madera. Traslado a Riópar. Visitaremos el Paraje de los Chorros, lugar donde nace el río Mundo. Construido al pie del antiguo Riópar, datado en la época romana, es el célebre asentamiento que trasladó a la población con motivo de sus Reales Fábricas de San Juan de Alcáraz, inauguradas en tiempos de Carlos III. Hoy en día Riópar sigue siendo conocido por su fabricación de bronce artesanal. Almuerzo en el hotel. Por la tarde realizaremos una excursión a la bella localidad de Liétor. Es de obligada visita la Iglesia parroquial de Santiago Apóstol, con el célebre órgano barroco del siglo XVIII obra del maestro Llopis. En su interior podremos visitar las tres colecciones del museo parroquial: la arqueológica, la numismática y la religiosa. También es de gran interés la ermita de Nuestra Señora de Belén, declarada Monumento Histórico Artístico; el ex convento de las Carmelitas Descalzas y las casas solariegas del siglo XV y XVII. También son destacables los miradores de la calle Pompa y del Portillo desde donde se obtienen unas vistas impresionantes sobre todo el valle. Regreso al hotel. Cena y alojamiento.

Día 4. Albacete – Origen

Desayuno. Visita a la ciudad de Albacete con guía local, ciudad moderna que mantiene intacto todo su sabor. En la parte más antigua de su perfecto entramado urbanístico conoceremos la catedral de San Juan Bautista. Se trata de una obra de concepción gótica pero que mezcla diferentes estilos. Su largo periodo de construcción, cuatrocientos años, ha dado como resultado una capilla gótica, cuatro grandes columnas renacentistas, diferentes elementos barrocos y una portada neogótica. La arquitectura religiosa de Albacete también se nos muestra en el antiguo monasterio de la Encarnación (s. XVI), hoy centro cultural, y en la iglesia de la Purísima Concepción. Nuestro recorrido nos llevará también a la Posada del Rosario, actual Oficina de Turismo, en la que podremos descubrir el resultado de la mezcla de estilos gótico, mudéjar y renacentista. El conjunto es Monumento Histórico-artístico Nacional, ya que constituye una buena muestra de este tipo de alojamiento, al más puro estilo castellano, que abundaba antaño por toda La Mancha. En la calle Tejares se encuentran algunas viviendas típicas de Albacete, con la tradicional organización de estancias alrededor de un patio central. La Casa de los Picos y la Casona Perona cuentan con fachadas blasonadas, lo que nos habla de la alta alcurnia de sus primeros moradores. Almuerzo en el hotel. Salida hacia el lugar de origen, con breves paradas en ruta. Llegada y fin de nuestros servicios.